EL CACIFRO : UNA JAULA-TRAMPA QUE FUNCIONA

Por A.G.N.

06 de Noviembre de 2012

                         

Todo buen especialista en supervivencia debe conocer, al menos, algunos sistemas básicos de trampeo que pueda adaptar a las condiciones variables del entorno donde se encuentre y a las diferentes especies que lo habiten.

     Una de esta trampas genéricas pensada para pequeñas aves que comen en el suelo, es el "Cacifro" nombre que le daban en Galicia a este artilugio y donde lo pude documentar hace  muchos años. Consiste en una caja piramidal  cuyas paredes están formadas por palos superpuestos y que tiene un sistema de disparo por medio de palancas,  que es activado al posarse o tocar el ave un arco interior, cuando quiere acceder al cebo.

     Buceando en la bibliografía , encontré modelos similares ya recogidos en los capítulos de caza y pesca  de la Enciclopedia Francesa de Diderot - D´Alembert.

     Cuando se trata de conseguir recursos alimenticios suele ser más operativo dirigir las acciones hacia animales de pequeño porte  que a los más grandes. El gasto energético de un acoso o un acecho de un animal grande, pongamos un ciervo, puede no ser rentable en términos de balance energético. Las trampas trabajan por nosotros. Esto lo saben bien muchas etnias que entre su cultura material destacan los trampeos, como en el caso del pueblo pigmeo.

   

  ME PROPUSE CON ESTA TRAMPA UN RETO... Construirla con otros materiales diferentes a los mimbres o varas rectas  que no siempre son fáciles de encontrar. Improvisar una solución nueva con materiales comunes, pero distintos. En las fotos podeis ver el resultado. Un "cacifro" solo construido con varas de anea ( Typha sp.) y caña ( Arundo donax )...   ¡ sin cordaje alguno ! ...

         

Cortando por la mitad los tallos de anea evitareis que quede demasiado hueco entre los travesaños, por los que se podría escapar el ave. En la base, sí que he utilizado  los tallos sin seccionar para mayor resistencia y poder clavar los ejes del arco interior. El fiador lleva tres muescas: una que abraza someramente el arco de caña, otra donde apoya la base de la pirámide y una tercera en el extremo opuesto donde se apoya el palo-soporte. Mirando las fotos lo vereis facilmente. El cebo, se colocará dentro del arco para que el ave se vea obligada a posarse o tocar el arco interior levantado del suelo unos pocos centímetros. La piedra superior permite dar peso al conjunto para que se desplome de forma rápida y luego ,retirándola, me permite meter la mano  y capturar el animal vivo.  Debeis disimular un poco el conjunto  colocando hojarasca, hierbas, etc encima. Para llamar la atención de las  aves , es interesante escavar un poco la tierra alrededor o voltear cepellones de hierba. La curiosidad los atraerá. Podeis usar de cebo gusanos , lombrices, frutos silvestres, etc.

    

Una de las ventajas de la captura en vivo es que podemos usar el ave también como reclamo o para otros trampeos de pequeños mamíferos, aves cazadoras etc. No olvideis que estos métodos no selectivos de caza están prohibidos por la Ley. Tradicionalmente, se usaron muchísimo como complemento en las economías de subsistencia.